K070 - Anomalías evidentes del tamaño de los maxilares
Las alteraciones de los huesos maxilares (inferior y superior) pueden producirse a cualquier edad.
En algunos casos se trata de malformaciones congénitas, es decir, ya están presentes en el momento del nacimiento.
En otros se producen durante el desarrollo del niño y los más surgen en la edad adulta de diferentes formas: quistes, traumatismos, problemas metabólicos, tumores, etc…
Alteraciones congénitas: La mayoría de este tipo de alteraciones maxilares se asocian a síndromes como el Down, Pirre Robín, del primer arco branquial, Crouzon, Apert, etc.,
y pueden originar diferentes problemas que afectan al desarrollo del niño, como trastornos de la masticación y la alimentación, dificultades de lenguaje, maloclusión, pérdida prematura de piezas dentales o alteraciones de la articulación temporomandibular,
Además de deformidades faciales que pueden ser muy apreciables.
Entre las posibles malformaciones destacan las siguientes:
- Micrognatia: Aumento de tamaño de la mandíbula.
- Prognatismo: El maxilar está más adelantado que la mandíbula.
- Retrognatismo: La mandíbula está más adelantada que el maxilar.
- Hipoplasia maxilar: Desarrollo deficiente del maxilar superior.
- Hipertrofia maxilar: Desarrollo excesivo del maxilar superior.
- Fisura labioalveolopalatina: No se desarrollan adecuadamente el paladar, los maxilares y las prominencias nasales.
- Asimetría mandibular o maxilar.